Querido Padre: te doy gracias por la vida de mi nuera. Hoy oro por ella, para que la bendigas, la sanes y protejas de toda enfermedad, la llenes de tu Espíritu Santo y le permitas disfrutar de tu presencia todos los días de su vida.
Unela cada día un poco más en tu perfecto amor con mi hijo, y sea luz en su hogar y en todo lugar donde ella esté. Que sus hijos y su esposo la llamen "bienaventurada" y su familia sea próspera y bendecida desde ahora y para siempre.
Amén